viernes, diciembre 16, 2005

Amor Maldito

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AMOR MALDITO

Tu vida y la mía se cruzaron una y otra ves.
Te di mi corazón a manos llenas, me tuviste tantas noches y una más.
Y te ame desde lo mas profundo, fui tu maestra y tu amiga, tu amante y tu hermana.
Hasta que una noche nos despertó la luna, y nos vimos desnudos y tuvimos vergüenza.
Y te culpé y me culpaste y corriste lejos a refugiarte en otros brazos más niños y ciegos.
Y fui cruel con tu corazón y tu alma, tu mente y tu cuerpo.
Nos hicimos mil heridas y luego nos besamos, pero los besos fueron amargos entonces,
Te miraba de reojo y me eras mágicamente atractivo, aún lo eres… siempre lo eres.
Te deseaba con dolor y con furia, a color y en blanco y negro.
Y nos hicimos el amor (si así se puede llamar), venganza de mi cuerpo, como luchando en una guerra sin ganadores, en la que nos dañamos sin sentido.
Y me entregaba con recelo y me tomabas con miedo, como un animal salvajemente herido .
Y un día nos dimos una tregua y nos sentamos frente a frente… desnudos a decirnos “te amo”, y esperar a oír como sonaban las voces en nuestros labios, los ecos en los oídos.
Y recordamos de pronto a Neruda, “ya no te quiero es cierto, pero cuanto te quise”.
Te amo, te dije y mire tus ojos fijamente, que rieron… nunca aprendiste a mentir.
Te amo y te dejo, con la libertad en tus alas. Para que seas feliz, para llenar de aventuras tus días y de locuras tus noches, locuras que no supe darte, que no supiste compartirme… cuando no reías de mis “te amo”.
Y me dejas libre, para buscar infinitamente mi rayo de luna, ese que no fuiste, eterna enamorada del amor.
Y me dejas libre, no sin una lágrima, en honor a los momentos y la vida, a los amaneceres abrazados y las tardes juveniles, cuando nuestra cama estaba viva.
Y te dejo libre sin poder evitar sentirme celosa, de la sombra que se va contigo… que estoy segura, no te conoce tanto como llegué a conocerte yo.
Fuiste tan mío como el sol de los atardeceres...
Y fui tan tuya como tuyos son los rayos de luna…

Pero fuimos... y eso basta.
¿Quien más será como nosotros dos fuimos uno al lado del otro?

martes, diciembre 13, 2005

El Corazón de Una Geisha



Ryota

No dijeron palabra,
el anfitrión, el invitado,
y el blanco crisantemo.

¿Que es lo que hay detrás de tus ojos?

El ideario popular piensa que las geishas eran bellas y carísimas prostitutas japonesas. La Flor del cerezo, el mundo flotante. Tan efímero y desconocido como la bruma de la mañana, y una Brisa de primavera, tan intenso como un mar en calma a punto de la tormenta. La verdad es que estas bellas mujeres, de las cuales orgullosamente llevo sangre. Eran criaturas dotadas y preparadas en las diferentes artes, con el objetivo de dar placer. En el sentido mas amplio de la palabra, no quedando excluidos las exquisiteces del concubinato. Mujeres ampliamente instruidas, capaces de mantener una conversación ya sea del tiempo y leyendas de la zona, hasta la actualidad política del país. Mujeres con gran influencia en los grandes círculos; preparadas tanto para preparar la ceremonia del té, como para la mejor danza amatoria. Quien llega a tocar el corazón de una geisha... conoce el placer del amor y la entrega por entero.

Sin embargo...llegar al corazón de una geisha... es como zambullirse en el mas azul y desconocido de los mares. Asi de hermoso, tortuoso, desconocido y peligroso. Pero si ella te da su corazón...

Pobre de Ella.

domingo, diciembre 04, 2005

Las Almas Gemelas

Eres la luz que perdí eones atrás;
eres la mitad de mi alma.
Eres la hechicera que caminó mil años,
en mi sombra.
Y mil años mas caminé tras de ti.
.....
Eres aquel que perdí en algún lugar,
en algún mundo.
Eres el que he buscado incesante en cada rostro
detrás de mi umbral.
El que he llorado mil sueños,
y una esperanza de volver a ti.
.....
Te he buscado en mis vigilias celosas,
y en mis sueños rotos.
En los jirones de mis viajes de marinero cansado
de otras almas, antes de ti.
En mis soles y mis lunas,
en mi piel que lleva el aroma dulce de ti.
....
...Estarás tan lejos como las estrellas, de este cuerpo
que no aguanta la lejanía del tuyo,
y se hace viejo y encorvado de tanta nostalgia de ti.
...Estarás tan cerca, como mi aliento
esas noches en las que abrazo mi almohada
sintiendo los átomos fantasmas del tuyo que perdí.
.....
Porque eres aquella que nació a mi lado... esa noche de los tiempos;
en la que los Dioses celosos de nuestro perfecto amor.
Separaron nuestras voces, mas intactas quedaron nuestras
almas, para llorarte cada día de sol.
.....
Y en esas noches en que la luna, deja ver su negro velo,
y las aves duermen en sus nidos, de añosos árboles de ayer.
En que podemos ver en el cielo,
una estrella fugaz que solitaria cruza para mi...
.....
allí en otro lado del tiempo... estás tú
con tus ojos eternos y tu negro pelo.
.....
allí en otro lado del tiempo... estoy yo
esperándote ...mi perdido AMOR.

jueves, diciembre 01, 2005

DESEOS DEL ÉXTASIS DE TI




DESEOS DEL ÉXTASIS DE TI

Cómo decirte todo aquello que vive dentro de mi,
Querer recuperar el tiempo perdido, es una locura
Solo quiero saber como poder tenerte y sentirte tan cerca como antes.
Me siento perdida en la niebla de tu ausencia, y
Ya no me importa la manera e poder estar a tu lado.
Es tanto una ilusión como necesidad para mi.
Recuperarte, recuperarte... solo eso sabe decir mi estúpido ser.
Y yo no puedo hacerle entender que aquello ya no es posible.
Me quema profundamente el deseo,
así como alguna vez quemaron tus besos.
Parece poder sentir tus malditas manos, bañando de angustia mi pecho
Pareciera tocar tu boca con cada exhalación de mi alma,
Dándote mi vida, poco a poco hasta el éxtasis como te la daba.
Es mi extraño sueño querer como antes,
cubrir tu ébano cuerpo con mis besos.
Recuperarte una vez mas, gritar tu nombre...
Y tu que no me oyes.
No me sueñas.
Y yo... exhalando y exhalando tu nombre, tocándome.
Átomo a átomo, recorriendo mi cuerpo, con mis manos...
Tus manos.
Para gustarte con tus cinco sabores,
sacarte de una vez de mi cuerpo, a pedazos y en jirones
de mi alma...
hay de mi, ...mis manos, tu cuerpo en mis átomos...
metido tan dentro de mis deseos.